De aspecto inconfundible, el girasol es una flor ideal para regalar a una persona a la que se le tiene un cariño especial. Se le puede dar como obsequio en un ramo, en una cesta o en una composición combinada con otras flores.
Sea cual sea el formato que prefieras, el significado es el mismo. Además de su potente simbolismo, es una flor tremendamente alegre, que transmite felicidad y que se usa como símbolo de positivísimo.
¿Cuál es el significado de los girasoles?
El significado de los girasoles abarca un repertorio bastante amplio de sentimientos y emociones, pero tradicionalmente se han asociado con sensaciones de felicidad, cercanía y alegría. También es para muchos la flor de la esperanza, y por eso está tan presente a la hora de hacer un regalo por aniversarios, eventos, citas personales, cumpleaños o simplemente para tener un detalle con esa persona especial.
El significado de los girasoles gira en torno a la felicidad, las relaciones sanas y duraderas, la honestidad y la transparencia de corazón. Por eso son flores que, en un ramo, son perfectas para regalar a familiares, amigos y parejas.
Todo lo que representa esta flor tiene que ver con el optimismo, por lo que tanto para reivindicar la buena relación que tienes con alguien como en los momentos difíciles, en los que hay que sobreponerse y cuando el apoyo de los seres queridos es más importante que nunca, la presencia de un ramo de girasoles puede ser un complemento ideal para transmitir todos tus buenos deseos.
Es difícil errar regalando girasoles, sobre todo por todas las connotaciones positivas que tienen. Son flores alegres, solemnes y muy agradecidas, que expresan sentimientos de paz, tranquilidad, optimismo y honestidad. Y al depender tanto su comportamiento del sol, se le atribuyen relaciones con los astros que están muy presentes en quienes son seguidores del esoterismo.
También se han asociado los girasoles a la longevidad y el paso del tiempo. Por eso son tan habituales a la hora de tener un detalle con nuestros antepasados más directos, sobre todo madres, padres, abuelas y abuelos. No en el sentido de hacer hincapié en la edad, sino como símbolo de que sabemos de dónde venimos y apreciamos nuestros orígenes, de los que ellos forman parte.
Pero eso no quiere decir que los girasoles estén reservados solo para personas de una franja de edad concreta. Es más, el significado de los girasoles va mucho más allá, asociándose con estados como la concentración o la administración de esfuerzos para alcanzar nuestras metas.
Además, teniendo en cuenta que de sus semillas nacen las pipas, muy nutritivas, es una flor que también se ha asociado con la prosperidad y el porvenir. Por tanto, regalar un ramo de girasoles es la mayor expresión de esperanza, cariño, respeto y buenos deseos para el futuro.
¿Cuándo es adecuado regalar girasoles?
Se nos ocurren pocas situaciones en las que sea una equivocación regalar girasoles. Porque nunca sabemos cuándo una persona cercana a nosotros puede estar pasando un mal momento. Por eso, hacer un regalo para transmitir tus buenos deseos para el presente y los momentos futuros nunca está de más.
Es una flor que encaja bien en cualquier momento: reencuentros, citas amistosas, reuniones familiares, visitas sorpresa… Se pueden entregar como obsequio único o acompañando un pequeño detalle. El resultado no podrá ser mejor.
En definitiva, estamos hablando de una flor que nunca sobra, y que siempre que está presente, aporta algo positivo. Tiene muchos significados, a cada cual mejor, y es una flor muy agradecida que siempre es capaz de levantar el ánimo, reforzando cualquier vínculo emocional que te una con la persona que va a recibir el ramo.
Tampoco existe ninguna regla que diga de cuántos girasoles se tiene que formar el ramo en función de lo que quieras transmitir, o qué formas debe adoptar para querer hacer llegar un tipo de sentimiento u otro. Es más, es la conjunción de todos ellos los que hacen que los girasoles sean un regalo tan completo.
Pautas para cuidar de los girasoles
Si has recibido un ramo de girasoles, ¡enhorabuena! Ahora ya sabes todos los buenos deseos que vienen implícitos en este obsequio de alguien que te tiene en alta estima. Ahora lo que toca es cuidarlos como se merecen para que duren el máximo tiempo posible.
Lo mas importante es que los girasoles estén bien hidratados, siempre hay que poner sus tallos en agua con la mayor brevedad posible, si estas están mas de una hora sin agua puede afectar su durabilidad rápidamente. Los girasoles tienen que tener agua casi a la altura donde estas van atadas, para asegurarnos que no quede ningún tallo fuera del alcance del agua.
Hay que quitar cualquier hoja que quede en el agua, ya que estas se pudren con el tiempo, lo cual crea bacterias en el agua que dañan los girasoles. Es importante cambiar el agua cada dos días y cortar los tallos de los girasoles 1 cm en diagonal, para que estas puedan asimilar el agua y sus nutrientes con mayor facilidad, esto es debido a que con el tiempo los tallos van cicatrizando por lo que restringe su capacidad de absorber agua.
Hay que evitar los rayos de sol directo o las temperaturas muy elevadas, ya que estas condiciones avanzaran el deterioro de los girasoles.
También es de gran importancia evitar las corrientes de aire directas o de aparatos como ventiladores o aire acondicionado, ya que esto reseca los pétalos y los puede marchitar con rapidez.