La gerbera es una planta de la familia Asteraceae, misma a la que pertenecen las margaritas. Por ello, pese a sus diferencias, estas dos especies de plantas tienen bastantes similitudes en cuanto a la forma de sus hojas y de sus flores. Así pues, la gerbera produce flores de vistosos colores y de un tamaño considerablemente grande.
Esto las hace perfectas para los amantes de la jardinería y del interiorismo. Por este motivo, mucha gente decide plantarlas en el interior de su hogar o decorar sus estancias con ramos de este tipo de flores.
En cuanto a las características físicas de este tipo de plantas, tenemos que decir que su raíz produce rizomas que pueden alcanzar más de 60 cm de profundidad. A partir de estos rizomas crecen sus tallos, sus hojas lanceoladas y en forma de roseta y sus flores de vivos colores. Sus hojas son grandes y resistentes, de un color verde vivo.
Además, sus tallos son alargados y sus flores pueden sobrepasar los 17 cm de diámetro. Estas pueden tener pétalos de diferentes colores dependiendo del ejemplar. Entre ellos, podemos encontrar el rojo, el naranja, el morado, el azulado e incluso el blanco. El tamaño de la planta en sí puede variar entre los 25 cm y los 50 cm de altura.
Son, por lo tanto, plantas muy codiciadas gracias a la variedad de colores que aportan dentro del hogar, así como en las terrazas y jardines. Sin embargo, para mantenerlas en perfectas condiciones, es necesario proporcionarles unos cuidados determinados. Por este motivo, en este artículo te vamos a explicar cómo cuidar las gerberas y haremos un repaso a las características de este tipo de plantas.
¿Cómo cuidar las gerberas?
Para cuidar las gerberas, en primer lugar, tenemos que ser conscientes de sus características principales y qué condiciones son necesarias para mantenerlas en perfectas condiciones. Por ejemplo, no debemos pasar por alto que es un tipo de planta que procede de las zonas tropicales del continente africano.
Esto quiere decir que habitan en zonas de bosques tropicales en las que existe una temperatura templada, de entre 16ºC y 25ºC, por lo que reciben mucha luz al día pero no de manera directa. Además, en estas zonas la humedad relativa también suele ser bastante elevada. Estas son las condiciones ideales que se encuentran en su hábitat natural. A partir de ahí, debemos prestar atención a los cuidados de la gerbera. Estos cuidados son muy sencillos y, de esta manera, tu gerbera lucirá perfecta en el interior de tu casa o en tu jardín.
Temperatura ideal para las gerberas
Recuerda que hemos visto que las gerberas viven en zonas tropicales, por lo que no soportan ni las temperaturas demasiado bajas ni las temperaturas demasiado elevadas. Como hemos comentado, una temperatura que se sitúe entre los 16ºC y los 25ºC es ideal para su perfecto desarrollo. En nuestro país este rango térmico se suele dar durante los meses de primavera, entre marzo y junio. Por este motivo, para los cuidados de una gerbera en maceta, debes tenerlo en cuenta y evitar que la planta quede expuesta en los meses de temperaturas extremas, especialmente durante las olas de frío y de calor que se dan en invierno y en verano.
Iluminación
Antes hemos comentado que suelen crecer en las zonas de bosques tropicales, por lo que suelen recibir mucha luz indirecta a lo largo del día. En casa, puedes tratar de emular estas condiciones. Por ejemplo, puedes situar tu planta frente a una ventana por la que no entre la luz del sol de manera directa o puedes ubicarla en una zona bajo un toldo. En el caso de que las ventanas de tu hogar estén orientadas hacia el sol, una buena solución es poner una cortina. Esto es vital para evitar que sufra quemaduras.
Tengo una gerbera, ¿cada cuánto debo regarla?
En las zonas tropicales suele llover bastante varias veces a la semana. Por este motivo, hay que regarlas de manera regular, pero teniendo en cuenta que el sustrato quede humedecido, pero sin encharcamientos. Si estás buscando información sobre cómo cuidar las gerberas en maceta, debes saber que lo más recomendable es humedecer el sustrato y evitar que quede demasiada agua.
De lo contrario, las raíces se pueden empezar a pudrir rápidamente debido a la proliferación de bacterias. Con regarlas una vez cada 3 días y asegurarse de que la maceta le proporciona el drenaje adecuado es suficiente. Asimismo, el riego deberá ser más frecuente durante la época de floración que durante el resto del año.
¿Debo utilizar abonos y fertilizantes?
Sí, recomendamos el uso de abonos y fertilizantes aproximadamente cada 15 días para los cuidados de una gerbera tanto en casa como en exterior. Esto debe tenerse especialmente en cuenta durante el periodo de crecimiento y de floración. El abono ideal debe ser rico en potasio y en fósforo, ya que ayudará a que crezca mucho más fuerte y hará que las flores sean apreciablemente más grandes y más resistentes.
¿Es recomendable podar las gerberas?
En absoluto, la gerbera es un tipo de planta que no necesita ser podada. Como mucho, tan sólo deberías eliminar las hojas o los tallos que se encuentren secos o en malas condiciones. Esto debes hacerlo de manera constante a lo largo del año, aunque puede que tienda a secarse un poco más a finales del verano y durante los meses de otoño, tras finalizar la floración. En este punto es imprescindible que utilices utensilios de poda desinfectados y en buen estado para no facilitar la entrada de hongos o el ataque de plagas.
¿Cuáles son los cuidados de una gerbera en casa?
Como hemos comentado, las gerberas son un tipo de plantas que crecen en mejores condiciones en el interior de los hogares, ya que obtienen las condiciones necesarias de luz, temperatura y humedad. Tan sólo debes asegurarte de regarlas de manera habitual varias veces a la semana, intensificar el riego durante la época de floración, pero teniendo mucho cuidado de no encharcar el sustrato. En este sentido es importante disponer de una maceta con un buen drenaje.
La iluminación debe ser generosa, pero la planta no debe exponerse de manera directa a la luz del sol para no sufrir quemaduras. Con ubicarlas frente a una ventana cubierta con una cortina que deje pasar la claridad puede ser suficiente. Debes utilizar, además, varios tipos de abonos para que crezcan con más fuerza.
¿Mi gerbera necesita cuidados en el exterior?
Definitivamente sí. En el exterior las gerberas requieren de unas condiciones similares a las que hemos nombrado para su mantenimiento en el interior del hogar. Por este motivo debes situar la planta en una zona exterior donde no reciba la luz del sol de manera directa. Puedes aprovechar la sombra de un árbol que tengas en tu jardín o la de un muro.
Si no dispones de ninguna manera de proporcionarle sombra, siempre puedes utilizar un toldo o tela para proteger la planta. En cuanto al riego, la temperatura y la humedad, las condiciones son exactamente las mismas, ya que requiere temperaturas templadas y el sustrato debe estar humedecido, pero sin encharcarse para que no se dañen las raíces de la planta.
En definitiva, a lo largo de este artículo te hemos mostrado cómo se cuidan las gerberas en el exterior y cómo cuidar las gerberas en maceta. Esperamos que, gracias a nuestros consejos, puedas proporcionar a estas plantas los mejores cuidados para que luzcan y florezcan de una manera espectacular. Es la mejor manera de alegrar tu jardín y darle vida al interior de tu hogar.